Abducido por las cometas

Llevo más e una semana sin escribir en el blog, pero es que he estado completamente abducido por el mundo cometero.

Además de comprarme una tercera, pequeñita de 2 metros, para los días de viento fuerte, me he registrado en dos foros especializados, en los que me pego horas leyendo post antiguos (aprendiendo teoría) y mandando nuevos preguntando dudas que tengo. Mi novia dice, con razón, que soy un "friqui".

También he cambiado mi Spot habitual (Amsterdamse Boss) y estoy yendo a la playa (esta semana tres días).

Lo cierto es que, a pesar de lo exagerado de la inversión de tiempo, estoy muy contento porque he evolucionado muchísimo y el eporte es precioso. He dejado atrás el vuelo en estático y, aprovechando que la playa es inacabable, estoy dándole al Kite Mountainboard, es decir, a ser arrastrado por la cometa subido en una tabla con ruedas.

Debe ser muy facil, porque ayer fue mi segundo día de rodar en serio, y ya me recorrí 10 kilómetros, desde Ijmuiden hasta Zaanvoort

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La sensación de libertad es total. Te echas las mochila a la espalda, y a rodar empujado por el viento. Cuando te cansas o quieres comer, bajas la cometa, la dejas enganchada por los frenos y le pones un poco de arena, te tumbas en la arena, tomas un poco el sol, comes, bebes, y a seguir.

Ayer cuando llegué a Zaanvoort me tomé una de las cervezas que mejor me supieron en mi vida, mientras veía ponerse el sol y hacía un poco de tiempo para coger el tren de vuelta a casa.